Según la Fundación Española del Corazón, cada año mueren en España en torno a 1.000 deportistas de entre 15 y 30 años por muerte súbita. Los reconocimientos deportivos constituyen una herramienta diagnóstica decisiva para evitar el peor de los desenlaces.
Según la Fundación Española del Corazón, el 88% de los casos de muerte súbita tienen un origen cardíaco; en deportistas menores de 36 años, la miocardiopatía hipertrófica estaría detrás de uno de cada dos fallecimientos.
En deportistas bien entrenados, síntomas de problemas cardíacos como la dificultad respiratoria y la fatiga pueden pasar desapercibidos al confundirse con sensaciones propias de esfuerzos muy intensos.
En los deportistas jóvenes, los mareos y los síncopes no revisten gravedad en la mayoría de los casos. Y así, más allá de lo desagradables que resultan – pues suelen ir acompañados de náuseas, sudoración, malestar general…- no tienen un significado pronóstico negativo. Sin embargo, y aunque menos frecuentemente, también podrían estar advirtiendo de arritmias graves u otras cardiopatías.
Los reconocimientos deportivos ponen el foco, además de en la mejora del rendimiento, en descartar patologías que puedan predisponer a la muerte súbita. «Hay alteraciones ya en el ECG que nos sugieren predisposición a arritmias y también centrarnos en descartar miocardiopatías como la hipertrófica, displasia, cardiopatía isquémica, mediante ergometría y ecocardiograma».
En este sentido, es fundamental que el reconocimiento deportivo corra a cargo de un equipo de profesionales capaces de discernir entre cambios adaptativos según la disciplina deportiva y patologías cardiovasculares. «Un objetivo es discernir qué es patológico y qué es una adaptación al ejercicio de alta intensidad».
Un reconocimiento para cada necesidad
Las sociedades médicas más prestigiosas vinculadas a la medicina deportiva establecen distintos tipos de reconocimientos en función del perfil del deportista.
1. Reconocimiento deportivo básico:
Recomendado para todo deportista y practicante de ejercicio físico.
Consiste en:
-Consulta con el médico: cuestionario de salud, valoración cardiopulmonar, exploración del aparato locomotor
-Antropometría
-Electrocardiograma
-Ergometría o prueba de esfuerzo
2. Reconocimiento deportivo avanzado:
Recomendado para todo deportista y practicante de ejercicio físico que presenten riesgo cardiovascular moderado, alto o muy alto, una edad biológica superior a los 35 años o para deportistas profesionales o que participan en competiciones.
Consiste en:
Consulta con el médico: cuestionario de salud, valoración cardiopulmonar, exploración del aparato locomotor
-Antropometría
-Analítica
-Electrocardiograma
-Ergoespirometría o prueba de esfuerzo
-Ecocardiograma Doppler
3. Reconocimiento deportivo avanzado sin analítica:
Recomendado para todo deportista y practicante de ejercicio físico que presenten riesgo cardiovascular moderado, alto o muy alto, una edad biológica superior a los 35 años o para deportistas profesionales o que participan en competiciones.
Consiste en:
Consulta con el médico: cuestionario de salud, valoración cardiopulmonar, exploración del aparato locomotor
-Antropometría
-Analítica
-Electrocardiograma
-Ergoespirometría o prueba de esfuerzo
-Ecocardiograma Doppler
4. Reconocimiento deportivo triatlón:
Recomendado para todo aquel deportista que practique la modalidad de triatlón.
Consulta con el médico: cuestionario de salud, valoración cardiopulmonar, exploración del aparato locomotor.
Consiste en:
-Antropometría
-Analítica
-Ergoespirometría o prueba de esfuerzo
5. Reconocimiento deportivo para niños:
Recomendado para todos aquellos niños por debajo de los 16 años, que realicen deporte de forma diaria y además tengan competición deportiva.
Consiste en:
-Consulta con el médico: cuestionario de salud, valoración cardiopulmonar, exploración del aparato locomotor
-Antropometría
-Electrocardiograma